Esta máquina carnal
que no respira ad líbitum
Este constructo doloroso,
esta constante deflagración,
lleva un tatuaje de cielo roto
en su corazón quemante
La Parca le amamanta en lo oscuro
con el pecho reseco de su muerte,
y traza en su memoria una herida
para el émbolo abyecto que la abre
Esta máquina infernal que siente
buscándose en un latido constante
Esta materia carnosa que se nutre
con el combustible de mi sangre
No tiene demora en su ataque
Me devora sin remordimiento
con el metal de su lenguaje
Esta máquina carnal que me hiere
Esta máquina carnal que me arde
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