Ya no es tiempo de
tristeza
Es el tiempo de las
armas
Armas como libros
empuñados
con gatillo de palabras
Ahora es tiempo
necesario
para alzar el grito
insurgente
Denunciar lo que nos
mata
tan profunda y
lentamente
Es el tiempo en que las
calles
nos emplazan a ser
fuertes
Calles de luz y ríos de
gente
colmados de verdad latente
Ya no es tiempo de resignarse,
ni de viajar en futuros
trenes sin
estación alguna por
infinitos andenes
Paraísos prometidos
como siempre
No, ya no es tiempo de
promesas
ni de serviles lacayos indiferentes,
que es el tiempo de ser
los jueces y
devolverle al pueblo
todos sus bienes
Estoy de acuerdo contigo, ya no es tiempo de todo eso, tenemos que unirnos y reclamar lo que nos están robando.
ResponderEliminarUn abrazo, desde mi mar,
Un abrazo Yashira, y ya sabes, nos vemos en esas calles, en esas plazas y en todos lados. ;)
ResponderEliminarBesos y abrazos