martes, 31 de julio de 2012

Disección para un latido






Cuando abrí el corazón,
se oyeron pájaros y aullidos
En el fondo de su abismo
atisbaba un algo excedente
Era un intenso latido solitario
que al extirparlo sutilmente
derramó un profundo alarido
Así recuperó de repente
el corazón su perdido tempo,
con aquél ritmo caligrafiado
en la partitura de mis sueños
Y en la cosecha de lo incierto…,
quise creer en el amor




1 comentario:

  1. Bonita forma de arrancar lo que duele para recuperar la fe en el amor, ojalá fuese tan fácil.

    Un abrazo Arturo, desde mi mar de sentimientos.

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