Me refiero a la niebla de
tu ausencia
A ese estar en todas
partes
con espejos inhabitables
en los bolsillos
Tal vez sea yo solo un
reflejo
y así no te comprenda
Cierto es que a veces te
mire
y sienta estar al otro
lado
Pero no pasa nada amor
Giramos a una velocidad
vertiginosa
aun estando parados
¿Cómo entonces queremos
percibir la distancia de
una boca
a menos de cinco latidos
y
comprender su sinrazón?
¿Su nada?
¿Qué importan las diferentes
horas?
¡Hagámosle el amor a la
luz
que se agita en el espacio
indolente
de un pensamiento sensual
cualquiera!
A veces la delicadeza es
una pantera de humo
que devora corazones tristes
en el silencio
Y así no puedo
acariciarte, pues
me faltan la mentira en
la piel
y lo febril de la
intangible querencia
Por eso me refiero a tu
ausencia
A este pastel amargo de los
sueños
en la tortura de las sentencias
En esta niebla sórdida de
frío y piélago
en donde yo te busco y tú
no me encuentras
Lo que me llueve es tu
soledad
de caracola prendida y entreabierta
bajo el mar libidinoso de
mi amor
Tu ausencia manifiesta
Tu ausencia…
¡Qué terrible
escolopendra en la garganta!
¡Qué golpe del corazón a
ninguna puerta!
¡Qué aullido de loba despierta
mi dolor!
¡Qué disección del olvido
entre tinieblas!
La niebla…
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